Después de tantos años que se han hecho siglos no hay razón para pensar que vaya a olvidar. Siempre acabaré regresando al mismo lugar.
No me importaría perder años. Sé que te quiero porque no te necesito y aún y así sigo queriéndote. Porque sobrevives al tiempo.
Aunque ya no me recuerdes con los mismos ojos, yo siempre desafinaré al decir tu nombre. Siempre te esperaré como te espero. Aunque sea en voz baja. Aunque sea con desdén.
miércoles, 12 de marzo de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
En mis episodios más graves -y creo que esto es algo bastante generalizado- siempre he tenido una cierta tendencia a recrearme en la depresi...
-
No quería contar mi historia porque siempre he sentido que hacerlo comprometería la imagen que algunas personas que me han seguido desde hac...
-
Dueles, como un frío afilado. Como una cuchillada aguda, inesperada. Como una frustración de años. Como la resignación de toda una vida. ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.